Paseo a caballo en Singapur

Todo un experto jinete

Última tanda de las vacacións de Semana Santa: un paseo a caballo por la Hacienda Singapur.

Vistas de la Hacienda Singapur

Esta fue la segunda vez que montaba a caballo y fue incluso mejor que la primera en el Parque de Tayrona. Las vitsas son espectaculares y no hay ninguna casa en kilómetros a la redonda; todo un auténtico lujo...

Vadeando un río

La verdad es que pasear a caballo es una auténtica maravilla, ya que son ellos quienes suben y bajan las cuestas, hunden las patas en el barro y vadean los ríos en lugar de uno...

¿A que parezco uno de los de Pasión de Gavilanes?

Tras 3 horas de recorrido acabé con las piernas y la espalda deshechos porque verdaderamente no es un ejercicio al que esté acostumbrado. Bueno, en realidad no estoy acostumbrado a ningún tipo de ejercicio, así que es normal que acabe molido después de cada sesión de cualquier cosa que sea exigente físicamente... aunque creo que me podría acostumbrar a esto y convertirme en un auténtico vaquero... (Risas).

A punto de asaltar la diligencia

Lo mejor de este paseo es que me podía mover con libertad, ya que en la vez anterior había un camino estrecho como única alternativa para avanzar. Esta vez, en cambio, había amplias praderas llanas donde poder cabalgar como un auténtico experto.

Disfrutando del paseo ecuestre

Después de esta sesión puedo decir que ya perdí todo el miedo inicial que le tenía a montar en estos animalitos. Es mucho más fácil y menos inseguro de lo que yo me pensaba. ¡En cuanto pueda repito!